La jardinería nos permite entrar en contacto con un estado puro de la vida gracias al hecho mismo de meter las manos en la tierra, donde somos capaces de sentir la fusión de los ritmos naturales por medio de la activación de nuestra percepción con estímulos aromáticos y táctiles.
Pero además de ser una experiencia estética y placentera para los sentidos que requiere creatividad, inspiración y sutileza, la jardinería también ofrece una sesión de gimnasia que ayuda a quemar calorías y refuerza la circulación sanguínea, el sistema óseo y la flexibilidad por implicar necesariamente el ejercicio de los brazos, glúteos, piernas y espalda, algo que afirman numerosos estudios científicos.
Por ejemplo, Investigadores de la Universidad de Arkansas realizaron un estudio entre 3310 mujeres mayores y encontraron que aquellas que participan en el trabajo de yarda y otros ejercicios de jardinería, tuvieron tasas más bajas de osteoporosis que aquellas que eran o fueron atletas, nadadoras y practicantes de ejercicios aeróbicos.
Por razones como esta nos hemos inspirado en este artículo para recomendarte esta gran terapia que puede evitarte un gran número de dolencias a nivel físico y emocional. En los días que te encuentres con bajo estado de ánimo o sobrecargado del estrés de la vida citadina, aventurarte dentro de tu jardín y establecer un diálogo cercano con la Naturaleza tendrá efectos benéficos e inmediatos. Un estudio reciente en los Países Bajos, concluyó que la jardinería combate el estrés mejor que otras actividades de ocio relajantes. Durante el estudio, dos grupos de personas realizaron una tarea estresante. Posteriormente, a un grupo se le indicó que practicara la lectura en un espacio interior y al otro, que practicara la jardinería en un espacio exterior durante 30 minutos. El resultado indicó que el grupo del jardín tenía mejor humor y niveles más bajos de cortisol (la hormona del estrés) que el grupo de los lectores.
Por otro lado, la fauna que verás llegar a tu jardín atraída por la belleza que le imprimas también es una de las ganancias que deja esta terapéutica actividad. Aves con cantos melodiosos y combinaciones exóticas de colores harán que sonrías y respires profundamente recargando tu energía y tu vitalidad con gracia.
Pero los beneficios de la jardinería no se detienen ahí. Otro estudio de la Universidad Estatal de Kansas afirma que aquellas personas que practican la jardinería activamente consiguen realizar con facilidad 150 minutos de ejercicio por semana, lo cual es bien conocido por ser uno de los componentes para manejar la diabetes o disminuir notablemente el riesgo que padecerla. Sin embargo, la única manera de evitar la diabetes por medio de la jardinería no es el ejercicio físico. Si decides cultivar tus propios alimentos estarás liberando tu organismo de la amplia cantidad de químicos preservantes utilizados en el mercado actualmente, por lo que también podrás mejorar la calidad de tu dieta en términos generales.
No obstante, aunque son decenas de beneficios para la salud corporal y mental de las personas, la jardinería también implica algunos cuidados para no resultar contraproducente. Antes de olvidarte de los problemas en el jardín es necesario aplicarte repelente contra los insectos y suficiente protector solar, ya que la exposición excesiva al sol puede resultar en otros problemas para la piel. Por ello también recomendamos trabajar en el jardín temprano en la mañana o tarde en el día, beber agua o jugo, usar calzado de protección, ropa cómoda y ligera que cubra la piel expuesta, un sombrero y guantes de jardinería. Si no cuentas con un jardín exterior en donde el uso de esos elementos sea necesario, puedes desarrollar actividades con las plantas al interior de tu apartamento; en cualquier caso ellas te lo agradecerán siendo tus mejores terapeutas.